Nadie se ha levantado y ha dicho: “Hoy quiero salir y dañar mis relaciones actuales y futuras. Creo que voy a bloquearme emocionalmente, socavar la confianza y dejar a mi pareja sintiéndose confundida, rechazada, enfadada y traicionada”.
Nadie dice eso, pero un número creciente de estudios demuestra que eso es exactamente lo que puede ocurrir como resultado del consumo de pornografía, especialmente mientras se mantiene una relación exclusiva.
Cuando la pornografía se mantiene en secreto
Tal vez el hallazgo más consistente de los estudios sobre pornografía hasta la fecha es que existe una brecha considerable entre los hombres y las mujeres cuando se trata de su consumo personal y la aceptación de la pornografía.
Decenas de estudios han demostrado que, si bien no es raro que las mujeres consuman pornografía, los hombres son más propensos que las mujeres a ver pornografía, y esto es particularmente cierto en el caso del consumo regular de pornografía a diario o semanalmente.Carroll, J. S., Busby, D. M., Willoughby, B. J., & Brown, C. C. (2017). The porn gap: Differences in men's and women's pornography patterns in couple relationships. Journal of Couple & Relationship Therapy, 16(2), 146-163. doi:10.1080/15332691.2016.1238796Copiar Y, los estudios también muestran que muchas mujeres en relaciones heterosexuales a menudo no son conscientes de la cantidad de pornografía que ven sus parejas.Carroll, J. S., Busby, D. M., Willoughby, B. J., & Brown, C. C. (2017). The porn gap: Differences in men's and women's pornography patterns in couple relationships. Journal of Couple & Relationship Therapy, 16(2), 146-163. doi:10.1080/15332691.2016.1238796Copiar
Teniendo en cuenta esta diferencia entre hombres y mujeres, probablemente no sea una sorpresa que las mujeres tiendan a ver la pornografía y sus efectos de forma muy diferente a los hombres.Olmstead, S. B., Negash, S., Pasley, K., & Fincham, F. D. (2013). Emerging Adults’ Expectations for Pornography Use in the Context of Future Committed Romantic Relationships. Archives of Sexual Behavior, 42, 625-635. doi:10.1007/s10508-012-9986-7Copiar Aunque cualquier persona de cualquier género puede desarrollar un hábito de pornografía, los estudios indican que muchas mujeres -incluso si creen que el consumo de pornografía está bien para otras personas- no ven un rol aceptable para la pornografía dentro de su propia relación seria.Olmstead, S. B., Negash, S., Pasley, K., & Fincham, F. D. (2013). Emerging Adults’ Expectations for Pornography Use in the Context of Future Committed Romantic Relationships. Archives of Sexual Behavior, 42, 625-635. doi:10.1007/s10508-012-9986-7Copiar
También es común que las personas descubran que su pareja ha estado consumiendo pornografía cuando no eran conscientes de ello, o que su pareja está consumiendo tipos de pornografía con los que no se sienten cómodas. Cuando esto ocurre, las parejas pueden sentir toda una serie de emociones negativas, como el rechazo, la soledad, la ira y la vergüenza.Tylka, T. L., & Kroon Van Diest, A. M. (2015). You Looking at Her “Hot” Body May Not be “Cool” for Me: Integrating Male Partners’ Pornography Use into Objectification Theory for Women. Psychology of Women Quarterly, 39(1), 67–84. https://doi.org/10.1177/0361684314521784Copiar
Incluso si no creen que la pornografía es lo mismo que el engaño, a menudo pueden sentir una profunda sensación de traición y desconfianza.Szymanski, D. M., Feltman, C. E., & Dunn, T. L. (2015). Male partners’ perceived pornography use and Women’s relational and psychological health: The roles of trust, attitudes, and investment. Sex Roles, 73(5), 187-199. doi:10.1007/s11199-015-0518-5Copiar Tylka, T. L., & Kroon Van Diest, A. M. (2015). You Looking at Her “Hot” Body May Not be “Cool” for Me: Integrating Male Partners’ Pornography Use into Objectification Theory for Women. Psychology of Women Quarterly, 39(1), 67–84. https://doi.org/10.1177/0361684314521784Copiar El secretismo, la vergüenza, el aislamiento y la desconfianza que puede introducir el consumo de pornografía en una relación pueden luego convertirse en una bola de nieve de todo tipo de problemas.Maddox, A. M., Rhoades, G. K., & Markman, H. J. (2011). Viewing Sexually-Explicit Materials Alone or Together: Associations with Relationship Quality. Archives of Sexual Behavior, 40(2), 441-448. doi:10.1007/s10508-009-9585-4Copiar
No puedes tener las dos cosas
Incluso si la pornografía no se mantiene en secreto -incluso si la pareja es abierta y honesta en cuanto a su consumo- puede causar un daño real.
Gran parte del daño se debe a que la pornografía fomenta expectativas poco realistas que la pareja siente que nunca podrá cumplir en una relación real. En las películas de pornografía, los actores siempre están en su mejor momento. Son eternamente jóvenes, mejoradas quirúrgicamente, retocadas con aerógrafo y con Photoshop hasta la perfección.Hilton, D. L., (2013). Pornography addiction—a supranormal stimulus considered in the context of neuroplasticity. Socioaffective Neuroscience & Psychology, 3:20767. doi:10.3402/snp.v3i0.20767Copiar Así que no es difícil ver por qué, según una encuesta nacional, seis de cada siete mujeres creen que la pornografía ha cambiado las expectativas de los hombres sobre el aspecto de las mujeres.Paul, P. (2010). From Pornography to Porno to Porn: How Porn Became the Norm. In Stoner, J. Stoner & Hughes, D. (Eds.), The Social Cost of Pornography: A Collection of Papers (pp. 3-20). Princeton, N.J.: Witherspoon Institute.Copiar
Pero no solo el aspecto físico se distorsiona en la pornografía. También se presenta a las mujeres como deseosas de tener sexo en cualquier lugar, en cualquier momento y con cualquier persona, y están encantadas de ir tan lejos y con tanta agresividad como uno o varios compañeros quieran. Siempre alcanzan el clímax, por lo general en voz alta y en éxtasis, y luego están inmediatamente listas para más. Nunca se cansan ni les duele. No necesitan descansar nunca. E incluso cuando dicen “no”, se insinúa que no lo dicen en serio. De hecho, parece que nunca necesitan nada en absoluto, excepto el sexo interminable. Se las representa como felices con cualquier cosa que un hombre quiera hacer, aunque sea arriesgada, dolorosa o humillante.Layden, M. A. (2010) Pornography and Violence: A New Look at the Research. In Stoner, J. & Hughes, D. (Eds.), The Social Cost of Pornography: A Collection of Papers (pp. 57-68). Princeton, N.J.: Witherspoon InstituteCopiar
Si crees que esas representaciones poco realistas no se cuelan en las creencias, expectativas y acciones de los consumidores, piénsalo de nuevo.Peter, J. & Valkenburg, P. M., (2016) Adolescents and Pornography: A Review of 20 Years of Research. Journal of Sex Research, 53(4-5), 509-531. doi:10.1080/00224499.2016.1143441Copiar
Por ejemplo, una encuesta reciente reveló que cuanta más pornografía consume un hombre, más probable es que esté insatisfecho con el tamaño de su pene. Y lo mismo ocurre con las mujeres con su pareja masculina: cuanta más pornografía consumen, menos satisfechas están con el tamaño del pene de su pareja.International Andrology London. (2017). The porn hypothesis – findings prove porn consumption fuels the desire for penis enlargement surgery in the UK. Retrieved from https://london-andrology.co.uk/news/the-porn-hypothesis-findings-prove-porn-consumption-fuels-the-desire-for-penis-enlargement-surgery-in-the-uk/Copiar Y en una encuesta realizada entre estadounidenses de 16 a 18 años, casi todas las participantes afirmaron haber aprendido sobre sexo viendo pornografía, y muchas de las jóvenes dijeron que se sentían presionadas a seguir los “guiones” que sus parejas masculinas habían aprendido en la pornografía.Rothman, E. F., Kaczmarsky, C., Burke, N., Jansen, E., & Baughman, A. (2015). “Without Porn…I Wouldn’t Know Half the Things I Know Now”: A Qualitative Study of Pornography Use Among a Sample of Urban, Low-Income, Black and Hispanic Youth. Journal of Sex Research, 52(7), 736-746. doi:10.1080/00224499.2014.960908Copiar
Se sentían obligadas a mantener relaciones sexuales en posiciones incómodas, a fingir respuestas sexuales y a consentir actos desagradables o dolorosos.
Por supuesto, el dolor causado por la pornografía puede ir mucho más allá de una mala experiencia en el dormitorio. Las personas que se enteran sobre el hábito de la pornografía de su pareja suelen interiorizar su vergüenza y confusión, preguntándose por qué no son “suficientes”.Szymanski, D. M., Feltman, C. E., & Dunn, T. L. (2015). Male partners’ perceived pornography use and Women’s relational and psychological health: The roles of trust, attitudes, and investment. Sex Roles, 73(5), 187-199. doi:10.1007/s11199-015-0518-5Copiar
Hay varios estudios que han demostrado que esta experiencia es bastante común en las relaciones en las que uno de los miembros de la pareja consume pornografía.Stewart, D. N., & Szymanski, D. M. (2012). Young Adult Women’s Reports of Their Male Romantic Partner’s Pornography Use as a Correlate of Their Self-Esteem, Relationship Quality, and Sexual Satisfaction. Sex Roles: A Journal of Research, Vol. 67(5-6), pp. 257-271.Copiar Por ejemplo, un estudio de mujeres universitarias jóvenes en relaciones heterosexuales con hombres que consumen pornografía descubrió que la frecuencia del consumo de pornografía por parte del hombre se correlacionaba negativamente con la sensación de autoestima de la mujer, su nivel de calidad de la relación y su grado de satisfacción sexual, y se descubrió que estos patrones negativos empeoraban cuanto más duraba la relación.Tylka, T. L., & Kroon Van Diest, A. M. (2015). You Looking at Her “Hot” Body May Not be “Cool” for Me: Integrating Male Partners’ Pornography Use into Objectification Theory for Women. Psychology of Women Quarterly, 39(1), 67–84. https://doi.org/10.1177/0361684314521784Copiar
Otro equipo de investigadores entrevistó a mujeres que estaban en terapia de pareja debido al consumo de pornografía de su pareja. Descubrieron que el consumo de pornografía está vinculado a sentimientos de traición y a la erosión del vínculo de apego en las relaciones de pareja. Los investigadores llegaron a la conclusión de que el análisis de los comentarios de las esposas revelaba una sensación de “distancia o desconexión con su marido” y “una sensación general de haber sido traicionadas y perjudicadas por su marido y, en consecuencia, de sentirse inseguras, emocional y psicológicamente hablando, e inseguras en su relación”.Zitzman, S. T., & Butler, M. H. (2009). Wives’ experience of husbands’ pornography use and concomitant deception as an attachment threat in the adult pair-bond relationship. Sexual Addiction & Compulsivity, 16, 210–240.Copiar
Si lo ponemos todo junto, hay cada vez más pruebas de que el consumo de pornografía puede afectar negativamente a la profundidad del apego y la confianza en las relaciones románticas.
Una nueva forma de hacer daño
En los últimos años, la omnipresencia del teléfono inteligente también ha marcado el aumento de los abusos con imágenes, a menudo denominados “pornografía de venganza”. El abuso con imágenes se refiere a compartir -o amenazar con compartir- imágenes desnudas o íntimas de alguien sin su consentimiento.
Los estudios han demostrado que las víctimas del abuso basado con imágenes experimentan una pérdida general de confianza en las relaciones, y muchas víctimas experimentan efectos severos y perturbadores de la salud mental; incluyendo, TEPT, ansiedad y depresión. Bates, S. (2017). Revenge Porn and Mental Health: A Qualitative Analysis of the Mental Health Effects of Revenge Porn on Female Survivors. Feminist Criminology, 12(1), 22–42. https://doi.org/10.1177/1557085116654565Copiar
Los investigadores de un estudio sobre el abuso con imágenes concluyeron lo siguiente:
“Las consecuencias negativas para la salud mental de la pornografía de venganza para las mujeres supervivientes son de naturaleza similar a los resultados negativos para la salud mental que experimentan las sobrevivientes de violaciones. Las sobrevivientes de violaciones suelen sufrir TEPT, ansiedad y depresión, todo lo cual experimentaron las participantes en este estudio.” Bates, S. (2017). Revenge Porn and Mental Health: A Qualitative Analysis of the Mental Health Effects of Revenge Porn on Female Survivors. Feminist Criminology, 12(1), 22–42. https://doi.org/10.1177/1557085116654565Copiar
Este estudio también descubrió que las víctimas del abuso con imágenes tienden a desarrollar mecanismos de afrontamiento negativos, como por ejemplo la evasión, la negación y la automedicación en un intento de evitar los sentimientos de desesperación y angustia con respecto a su victimización. Este y otros estudios revelan la gravedad de la pornografía de venganza, los efectos devastadores que tiene en la salud mental de los supervivientes y las similitudes entre la pornografía de venganza y las agresiones sexuales. Bates, S. (2017). Revenge Porn and Mental Health: A Qualitative Analysis of the Mental Health Effects of Revenge Porn on Female Survivors. Feminist Criminology, 12(1), 22–42. https://doi.org/10.1177/1557085116654565Copiar
De forma preocupante, se calcula que 1 de cada 12 adultos estadounidenses afirma haber sido víctima de abusos con imágenes y, lo que es aún más preocupante, 1 de cada 20 afirma haber sido autor de abusos con imágenes.Ruvalcaba, Y., & Eaton, A. A. (2020). Nonconsensual pornography among U.S. adults: A sexual scripts framework on victimization, perpetration, and health correlates for women and men. Psychology of Violence, 10(1), 68-78. doi:10.1037/vio0000233Copiar
De manera interesante, las investigaciones también sugieren que, dado que los consumidores habituales de pornografía tienden a desarrollar actitudes de objetivación sexual, están más dispuestos a compartir imágenes íntimas de otra persona sin su consentimiento.van Oosten, J., & Vandenbosch, L. (2020). Predicting the Willingness to Engage in Non-Consensual Forwarding of Sexts: The Role of Pornography and Instrumental Notions of Sex. Archives of sexual behavior, 49(4), 1121–1132. https://doi.org/10.1007/s10508-019-01580-2Copiar Seabrook, R. C., Ward, L. M., & Giaccardi, S. (2019). Less than human? Media use, objectification of women, and men’s acceptance of sexual aggression. Psychology of Violence, 9(5), 536-545. doi:10.1037/vio0000198Copiar
Conclusión
La investigación es clara: la pornografía no es un pasatiempo inofensivo, especialmente cuando perjudica a la pareja. Pero la investigación también deja claro que la vergüenza no es una forma eficaz de motivar a alguien para que cambie.Brown, B. (2012). Understanding and combating shame. Daring greatly: How the courage to be vulnerable transforms the way we live, love, parent, and lead. Avery.Copiar Según un estudio de personas que intentaban dejar la pornografía, los investigadores descubrieron que la vergüenza predecía un aumento del consumo de pornografía, mientras que la culpa predecía un cambio sostenible.Gilliland, R., South, M., Carpenter, B. N., & Hardy, S. A. (2011). The roles of shame and guilt in hypersexual behavior. 18(1), 12-29. doi:10.1080/10720162.2011.551182Copiar
Así que si estás intentando dejar la pornografía, sé amable contigo mismo y ten paciencia con tu progreso. Como todo, el cerebro tarda en recuperarse, pero los esfuerzos diarios marcan una gran diferencia a largo plazo.
Amar a alguien es enfocarse, ver lo bueno y lo malo y amarlo de todos modos. Enfocar tu tiempo, tu energía y tu amor en alguien que te devuelve la atención es uno de los mejores sentimientos del mundo. Sin embargo, con demasiada frecuencia la pornografía rompe ese enfoque. Centrémonos de nuevo en el amor.
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Si tú, o alguien que conoces, quiere dejar de consumir pornografía, ¡debes saber que no estás solo y que hay esperanza! Para algunas personas es útil hablar con un amigo, un familiar, un consejero u otra persona de confianza en su vida. Además, hay recursos disponibles en Internet que pueden ayudar. Consulta a nuestros socios afiliados en Fortify para obtener apoyo basado en la ciencia para la recuperación duradera de la conducta sexual compulsiva.
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